ROCK AND ROLL DEL BUENO

TRUCKLIFE

Una visita a la empresa Bärnreuther + Deuerlein Schotterwerke

Algunas veces puede ser mejor: como el MAN TGX 18.640, que la empresa Bärnreuther + Deuerlein Schotterwerke llevó a la cantera para celebrar su décimo aniversario.

A las doce del mediodía, una sonora bocina suena sobre los extensos terrenos de la cantera. «Con nosotros no queda ninguna piedra en pie», cuenta a la cámara Anna Bärnreuther de la empresa Bärnreuther + Deuerlein Schotterwerke. Justo después, detonan una parte del frente de roca de la cantera. Se levanta mucho polvo. Un brillante comienzo para el vídeo de la Lion Story sobre Bärnreuther + Deuerlein y un escenario perfecto para la aparición del MAN TGX 18.640, que emerge en la siguiente toma con una enérgica música de fondo. Tiene escrito en el volquete «We will rock you» y, de hecho, la mirada del león en la parte superior, que también aparece rugiendo en los laterales de la cabina, es puro rock. Para celebrar el décimo aniversario de la empresa no querían usar un camión cualquiera, sino uno con el que los ojos se llenasen de luz al mirarlo y que todos los conductores quisieran conducir.

«Es un honor para nosotros ser uno de los primeros clientes en recibir el nuevo MAN TGX.»

Anna Bärnreuther

Tenía que ser lo mejor de lo mejor para el aniversario y para los conductores. Por este motivo, el equipamiento del MAN no deja nada que desear y su motor de 640 CV proporciona el «rock and roll» necesario que prometen las siglas MAN TGX de la visera.

La suerte hizo que lo recibiera un empleado que lleva muchos años en la empresa, Rainer Weißmüller. Este hombre de 41 años trabaja como conductor profesional desde hace casi 20 años, primero para Bärnreuther y, desde la fusión hace diez años, para Bärnreuther + Deuerlein Schotterwerke. «Es un honor para mí ser el primero en la empresa en conducir el MAN TGX 640», dice Rainer con ojos brillantes. Para alguien que conduce camiones con «corazón y pasión», como él dice, las cosas no podrían haber ido mejor. En cuanto acabó sus estudios quiso formarse para trabajar como conductor profesional, el trabajo de sus sueños, pero como todavía era demasiado joven para obtener el permiso de conducir, primero tuvo que aprender otra profesión. Se decantó por albañil. En cuanto cumplió los 21 años, obtuvo su licencia para conducir camiones y cumplió su sueño. Ahora, 20 años más tarde, la suerte del sorteo ha decidido que pueda llevar el MAN más potente de la empresa, que también tiene otros 40 vehículos MAN en su flota, como vehículo regular durante los próximos cinco años. Esto concretamente significa que Rainer cargará el camión del aniversario con grava y otros materiales de construcción todos los días para entregarlos en las respectivas obras. Él y su MAN de estilo superior llamarán mucho la atención:

«Cuando vas en un vehículo así, todo el mundo te mira.»

Rainer Weißmüller

No solo le convence la apariencia del potente MAN, sino que también aprecia sus valores internos. Sobre todo el asistente de cambio de carril y la asistencia en giros, así como los nuevos y más amplios retrovisores, que tienen también su aprobación. Se trata simplemente de la sensación de poder garantizar la seguridad de los demás usuarios de la carretera y de uno mismo. También cree que la «tira de botones» junto al acceso es muy útil para su trabajo, ya que le permite utilizar varias funciones, como activar las luces de emergencia, el faro de trabajo o usar los elevalunas sin tener que subir a la cabina. Y luego, por supuesto, fue una sensación increíble que le permitieran conducir este camión. Cuando Rainer aceptó la invitación de Alexander Hefele, comercial de MAN, y vino a Múnich a recoger el MAN TGX, apenas podía creer su suerte: «Este camión es nuestro camión de aniversario, y soy uno de los primeros conductores en pisar la carretera con un camión de la nueva generación».

Rainer está muy satisfecho con su trabajo en Bärnreuther + Deuerlein Schotterwerke. Le gusta el ambiente de trabajo abierto y familiar y la confianza que sus jefes depositan en él. Aparca el MAN TGX en la puerta de su casa cuando vuelve de trabajar. Desde allí empieza de nuevo al día siguiente, preferiblemente, en dirección al sol: «En un día de verano, a las tres de la mañana empiezo mi ruta hacia el sur, al ritmo de la música, y veo el sol salir lentamente. Es simplemente increíble». O puro rock and roll.